No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia.
Cuando salgas a la batalla contra tus enemigos y veas caballos y carros, y pueblo más numeroso que tú, no tengas temor de ellos; porque el SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto está contigo.
Porque yo soy el SEÑOR tu Dios, que sostiene tu diestra, que te dice: ``No temas, yo te ayudaré.
No tengas miedo, pues yo estoy contigo; no temas, pues yo soy tu Dios. yo te doy fuerzas, yo te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa.
Quizás nunca ha experimentado algo parecido, pero tal vez esté pasando por una situación que lo tenga muy preocupado. Por ejemplo: ¿está luchando con una debilidad que le gustaría superar, pero comete el mismo error una y otra vez? ¿Hace tiempo que no encuentra trabajo a pesar de sus esfuerzos? ¿Le preocupa llegar a la vejez y tener problemas de salud? ¿Hay algún otro problema que le esté quitando el sueño?
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.
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